La Empresa Pública Nacional Textil (Enatex) y la Empresa Minera Huanuni (EMH) atraviesan por momentos de iliquidez, siendo las dos estatales con más problemas económicos en la actualidad. Es por ello que los expertos apuntan al Gobierno central como el principal responsable de la situación, sugiriendo el cierre de estas como el único camino a seguir o a reducir drásticamente el número de trabajadores, además de conseguir mercados rentables.
Si son deficitarias deben cerrarse. El economista, Germán Molina, señala que el principal motivo para la situación que atraviesan Enatex y Huanuni es que el costo de su producción está por debajo del precio comercializado, además que no existen mercados rentables (en el caso de Enatex) como lo fue Estados Unidos hace algunos años atrás. Por ello considera que el Gobierno es el principal responsable de esta situación, por lo que debe cerrar estas empresas que están representando gastos económicos para todos los bolivianos.
"Cualquier empresa sea pública o privada, su precio comercializado debe ser mayor o igual al costo medio de la producción, pero cuando ese precio está por debajo de la producción y ni le alcanza para cubrir la planilla, esa empresa inmediatamente tiene que cerrarse, no tiene sentido que funcione. Si es privada se cierra porque los accionistas a los que están gestionando así lo exigirían, pero si es estatal, los accionistas son los 10 millones de bolivianos que aportamos con nuestros impuestos y que están siendo mal utilizados", explicó Molina.
El experto indicó que todo cierre de empresas tiene un costo social que debe ser cubierto por el Gobierno a través de jubilaciones, pago de beneficios sociales, entre otros, ya que fue este quien decidió "apostar" por dichas empresas.
En el caso de Enatex, después de ser relativamente solvente, los beneficios arancelarios se suspendieron con la actual administración, por lo que los textiles bolivianos fueron a parar a Venezuela, un mercado poco rentable. Es así que a la fecha Enatex no puede pagar sueldos de planilla. Mientras que Huanuni al absorber a los trabajadores cooperativistas, aumentó considerablemente a 5.000 su planilla de asalariados, además de asignarles grandes renumeraciones, posteriormente el precio internacional del estaño descendió de $us 11 la onza troy hasta por debajo de los $us 7,5, o sea, que el precio está por debajo del costo de producción, y se debe pagar a una gran masa laboral.
Es decir que el contexto internacional y los mercados fueron factores vitales para la actual situación de las dos estatales, señala Molina.
El experto dice que los ciclos económicos duran alrededor de una década, es el caso de la bonanza que benefició a Bolivia desde 2003 - 2013, ciclo que ya culminó y que ya se está viviendo una desaceleración de la economía, por lo que estima que hasta el 2023 se tendrá el mismo contexto internacional y por tanto influirá negativamente al país.
El Estado no es un "buen empresario". De igual forma, Armando Méndez, economista y expresidente del Banco Central de Bolivia (BCB), comentó que las únicas salidas para las dos empresas estatales, son: reducir drásticamente el número de empleados en el caso de Huanuni y asegurar nuevamente el mercado de Estados Unidos en el caso de Enatex. También comentó que las empresas privadas son más eficientes que las empresas públicas, porque se rigen por dos pilares del libre mercado; la competencia y la búsqueda de rentabilidad, aspectos que no se enmarcan en los modelos estatales.
"Enatex y Huanuni son dos ejemplos que suele suceder cuando el Estado empieza a ser empresario. Está comprobado en todo el mundo, que las empresas privadas son más eficientes, porque su objetivo es generar rentabilidad y están sujetas a la competencia, mientras que en las estatales no tienen competencia, ni su objetivo es la rentabilidad, por eso se dan estas situaciones", manifestó Méndez a tiempo de añadir que por el bien del país, espera que ninguna otra empresa pública atraviese por la misma situación que las dos antes mencionadas, ya que representan gastos para los bolivianos.
Se aumentará la productividad para que Huanuni genere utilidades. Por su parte, Marcelo Quispe, presidente de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), comentó que al primer trimestre Huanuni tuvo un déficit de aproximadamente $us 4 millones, debido a la caída del precio del estaño que se situó hasta en $us 6,92 la libra fina, mientras que la estatal trabaja con un equilibrio de $us 7,5 la libra fina. Es por ello, que anuncia que se aumentará la productividad a través de dos emprendimientos: el nuevo Ingenio de Tratamientos de Minerales Complejos que producirá alrededor de 350 toneladas por día de concentrados de zinc, plomo, plata y estaño, además se está implementando una Planta para tratar concentrados de baja ley (15, 18 y 20%), alcanzado incluso hasta un 45% de concentrados de estaño.
"Huanuni es una empresa importante para el Estado Plurinacional, ya que genera en su totalidad concentrados de estaño para la Empresa Metalúrgica Vinto. Debido a la caída del precio del estaño hemos tenido problemas de carácter económico, pero esperamos generar utilidades hasta fin de año con los dos nuevos emprendimientos técnicos", resaltó Quispe.
Además, se tiene previsto la jubilación de aproximadamente 500 trabajadores, para ello prevé conseguir los fondos a través del Ministerio de Minería y el Ministerio de Economía y con esto mermar los gastos que se tiene en planilla.
Huanuni empezó con aproximadamente 500 trabajadores y a la fecha tiene 4.138 asalariados, con el retiro de 500 empleados en edad de jubilación, la empresa disminuiría su personal a 3.638 y así espera poder sostener las fuentes laborales.
"Lo más importante es generar fuentes de empleos y ser sostenibles en los mismos", resaltó Quispe.
De acuerdo al Presupuesto General del Estado (PGE 2015), todas las empresas públicas reciben Bs 104.932 millones, mientras sus gastos alcanzan a Bs 90.806 millones, llevándose las estatales el mayor porcentaje de la torta a repartir.
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