Los primeros años de la producción de cemento de la fábrica que será instalada en Jeruyo, servirán para pagar la inversión de 306 millones de dólares, que será el costo de la construcción, equipamiento y puesta en marcha de la empresa, informó el vicepresidente, Álvaro García Linera.
"Estos 306 millones le dará cualidad industriosa al departamento de Oruro, y tiene que haber recuperación del capital, tardaremos un año, dos, tres cuatro, cinco, hay que devolver los 306 millones de dólares al Banco Central, y luego veremos cómo nos distribuimos las ganancias", explicó el mandatario.
García aseguró que la presencia del Estado en el mercado permite regular precios, impidiendo que existan abusos de parte de la empresa privada que asegura en algunos casos venden al doble del precio o esconden el producto.
"La presencia del Gobierno permite siempre controlar que no haya subidas exageradas, ni sabotajes a la producción, el sector privado seguirá produciendo y que bien que siga produciendo, nosotros estamos para regularle que no cometa abusos", expresó el vicepresidente.
Dijo que la demanda del cemento va en crecimiento, que luego del gas es el cemento que se requiere en el país, sin embargo, si se mantiene el nivel de crecimiento para el año 2020 ó 2023 será necesario ampliar esta fábrica que empezará a funcionar en 2017.
Indicó que inicialmente toda la inversión está a cargo del Tesoro General de la Nación, porque no se puede pedir a la Gobernación de Oruro que invierta los 2.100 millones de bolivianos que se requieren cuando sólo cuenta con 148 millones de bolivianos para proyectos en el departamento.
"Son 86 millones de toneladas de piedra caliza que se tiene en reservas, lo que permitirá mantener la fábrica por 80 años, hay otros yacimientos pero con pequeñas reservas, este es un mega yacimiento, que nos garantiza 80 años
de producción. Está en Caracollo, porque está cerca del yacimiento, cerca del ducto de gas y de las vías de comunicación", señaló García
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